Si te encuentras en medio del proceso de la Ley de Segunda Oportunidad, seguramente ya hayas notado la existencia de un plan de pagos. Se trata de un elemento crucial en este procedimiento y que puede definir muchos aspectos sobre el pago o exoneración de la deuda del deudor. Se trata de un aspecto que todos deben conocer, ya que este tiene la capacidad de extenderse incluso para hasta 10 años.
A través del plan de pagos, muchas personas también pueden definir si vale la pena acogerse a la Ley de la Segunda Oportunidad; o si es mejor buscar otras alternativas para saldar una deuda. En este artículo te explicamos el objetivo de este proceso, cuándo se implementa en la Ley y que puede suceder si tu plan sea aprueba. ¡Continúa leyendo!
¿En qué consiste y cuál es el objetivo de un plan de pagos?
Tal y como su nombre lo describe, un plan de pagos no es más que una planificación en la que se fija cuándo y cuánto va a pagar el deudor hasta saldar su deuda con los acreedores. Esta suele hacerse en modo de calendario y su diseño es una parte muy crucial de la Ley de Segunda Oportunidad.
Su principal objetivo es reestructurar las deudas pendientes; es decir, brindarle al deudo un nuevo método a través del cual pueda empezar a pagar sus deudas, adaptándose a su capacidad económica vigente. El plan de pagos puede establecerse durante dos fases diferentes de la Ley de Segunda Oportunidad.
Primero, durante la fase extrajudicial, en la cual el plan de pagos debe presentarse al menos 20 días antes de reunirse con los acreedores. Esto les da tiempo a los acreedores de establecer propuestas y negociar un plan mejor. Si no se llega a un acuerdo durante esta fase, es cuando el plan de pagos se lleva a la fase judicial.
Durante la fase judicial se inicia el concurso consecutivo. En el mismo se elabora un nuevo plan de pagos que se aprobará de manera judicial. Este deberá ser respetado por ambas partes, y tanto el acreedor como el deudor tienen la obligación de cumplirlo. Sin embargo, cabe destacar que no importa la fase en la que se presente dicho plan, este siempre tendrá que ser aprobado por los acreedores.
Lo que sucede cuando se aprueba un plan de pagos
Ya hablamos sobre lo que sucede cuando un plan de pagos no es aprobado por los acreedores. ¿Pero qué sucede en el caso contrario? Existen varios escenarios dependiendo de la fase. Durante la fase extrajudicial, puede pasar que se cancelen total o parcialmente las deudas. Asimismo, existe la probabilidad de un aplazamiento de los pagos, la cesión de parte del patrimonio para saldar deuda e incluso transformar la deuda en acciones o participaciones.
Por otro lado, durante la fase judicial los efectos que puede tener el plan de pagos son diferentes. Se debe a que durante esta fase sí se toman en cuenta los créditos públicos. Por lo tanto, está bajo el poder del juez en decidir si estos créditos se deben incluir en el plan de pagos; en caso de que el deudor los haya contraído.
¿Cuánto dura un plan de pagos?
En la mayoría de los casos, se espera que los efectos antes mencionados del plan de pagos tengan una vigencia de 5 años. Sin embargo, cuando se aprueba el plan durante la fase judicial con más del 75% de los votos, su duración podría ser hasta los 10 años.
BEPI en la fase judicial
Los efectos del plan de pagos son muy variados. Otro que no podemos olvidar mencionar es en el que, si se aprueba el plan durante la fase judicial; el BEPI puede hacerse definitivo. Se trata del Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho, en el que se condona una deuda que no se ha podido satisfacer por completo.
El principal beneficio
Elaborar un buen plan es muy importante en el proceso de la Ley de Segunda Oportunidad. Se debe a que este es el encargado de establecer que el pago se adapte a la situación económica del deudor. Por lo tanto, será más fácil para la persona saldar su deuda sin tener que poner en peligro su estabilidad económica. ¿Necesitas elaborar un plan de pagos eficiente y beneficioso? Nosotros podemos ayudarte a lograrlo. ¡Nuestros profesionales cuentan con años de experiencia en este proceso!
